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El flamenco es arte excelso, pero también una peculiar forma de vida o
al menos una forma de ver esta. Por eso la imagen es determinante tanto para
el acercamiento neófito a su mundo como para la profundización en el
conocimiento de sus gentes y de sus formas iconográficas. Uno de los
centinelas más notables en la historia de este arte es Paco Sánchez.
Cronista visual del flamenco desde el ocaso de la Segunda Edad de Oro hasta
convertirse en el auténtico maestro hegemónico de la actualidad flamenca,
los flamencos y sus mundos.
Todo ello es posible – al margen de condiciones técnicas, entrenamiento y,
aptitudes intelectivas a raudales, que también las tiene- como consecuencia
del profundísimo conocimiento de nuestro superior arte y su empatía con su
polimorfo mundo. |
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